EL DOCTOR JEKYLL Y MR. HYDE
Creo que por todos es conocida la trama de la novela del Robert Louis Stevenson “El doctor Jekyll y Mr. Hyde”. En ella los personajes reflejan fielmente los dos extremos, el bien y el mal, el blanco y el negro, la luz y la oscuridad; conviviendo en un mismo ente. Pues bien, aviso para navegantes; si acudes a ver un partido del Cadete Femenino puede ser que te encuentres al Doctor Henry Jekyll, el bueno, el ambale, el que lucha y sabe hacer las cosas bien, el que cuando termina el partido te sientes orgulloso de haber visto un gran espectáculo, plantando cara a cualquier equipo y tratándolo de tú a tú, sea del nivel que sea…o por el contrario te puedes encontrar una caricatura de equipo que parece que no haya visto una pelota en su vida, reflejando la anarquía y la pasividad más absoluta ante equipos claramente inferiores que nos pasan por encima sin despeinarse…
La semana pasada hacíamos referencia desde estas mismas líneas a que debíamos hacer reflexión de lo ocurrido en el partido que nos enfrentó al Teixereta…Sinceramente, pienso que el equipo no la ha hecho y lo que es peor, no muestra ninguna intención de hacerla.Creo que por todos es conocida la trama de la novela del Robert Louis Stevenson “El doctor Jekyll y Mr. Hyde”. En ella los personajes reflejan fielmente los dos extremos, el bien y el mal, el blanco y el negro, la luz y la oscuridad; conviviendo en un mismo ente. Pues bien, aviso para navegantes; si acudes a ver un partido del Cadete Femenino puede ser que te encuentres al Doctor Henry Jekyll, el bueno, el ambale, el que lucha y sabe hacer las cosas bien, el que cuando termina el partido te sientes orgulloso de haber visto un gran espectáculo, plantando cara a cualquier equipo y tratándolo de tú a tú, sea del nivel que sea…o por el contrario te puedes encontrar una caricatura de equipo que parece que no haya visto una pelota en su vida, reflejando la anarquía y la pasividad más absoluta ante equipos claramente inferiores que nos pasan por encima sin despeinarse…
El partido que nos enfrentó el sábado al Akra Leuka, líderes desde el inicio del campeonato, fue en el que nos encontramos al Doctor Jekyll, se hicieron bien las cosas echando en falta únicamente algo más de acierto durante los dos primeros cuartos; sin embargo la segunda mitad del partido fue claramente nuestra, obligando al líder del campeonato a emplearse muy a fondo para poder doblegarnos.
En cambio, el partido aplazado que se jugó apenas 24 horas después en San Vicente, contra el Adesavi fue un cúmulo de despropósitos. Fallos monumentales en defensa y en ataque, nula concentración a lo largo del partido y de nuevo el nerviosismo del final ante un rival de la parte baja de la tabla que no debería de haber presentado excesiva dificultad. Escaso tanteo en el marcador que refleja fielmente el soporífero partido que jugaron las nuestras (38-30)
Llegamos a la mitad del campeonato sin saber aplicar con consistencia nuestro juego, sin tener la continuidad necesaria para creernos que somos UN BUEN EQUIPO y esas cosas al final de los partidos son importantes. La pregunta, llegados a estas alturas es ¿…y a partir de ahora quien DECIDIMOS ser, el Dr. Jekyll o MR. Hyde?
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